IMPRESIONANTE CAMBIO DE IMAGEN.             DE LA AGRESION A LA ESPERANZA.

Fue el desepero de la gente de Zipacoa “ahogada” de sed quien inpiró esta conversion en la imagen de esta tanqueta otrora simbolo de represión y agresión por la esperanzadora imagen de vida que emana de sus entrañas. La sequía que abraza al corregimiento de Zipacoa, jurisdicción de Villanueva, Bolívar, era insoportable, la tanqueta del UNDMO conocida por su papel en la contención de disturbios, surge como un emblema de esperanza al llevar agua potable a más de 150 familias desesperadas. Un acto solidario que cambia la percepción de la máquina represiva, inundando de vida y alegría a una comunidad afectada por la sed, la sequía y la escasez del vital líquido. La Policía de Bolívar destaca la importancia de estar del lado de la comunidad ala hora de aliviar sus gondojas ocasionadas por los estragos del fenómeno de El Niño.

Los niños, en medio del sofocante calor, recibieron con júbilo el chorro de vida emanado de la tanqueta y que recreó una lluvia torrencial y esperanzadora que les permite liberar con el calor, risas contagiosas. El gesto trasciende la imagen previa de la tanqueta que refleja la esperanza devuelta a quienes menos lo esperaban. La población de Zipacoa, acostumbrada a ver la tanqueta en situaciones de tensión, observó con asombro y gratitud cómo este símbolo de fuerza se convierte en un proveedor de vida. Tanques, bolsas, baldes y cualquier recipiente disponible era necesario para recoger el preciado líquido.

Las sonrisas, antes ocultas por la carga de la escasez del agua potable, ahora resplandecen en cada rostro zipacoero. La solidaridad encarnada en la acción de la Policía Bolívar es un sentimiento que germina en la comunidad, forjando un camino conjunto de esperanza y trabajo en equipo.

El coronel Alejandro Reyes Ramírez, líder de esta noble iniciativa, comparte su orgullo como Institución al contribuir al bienestar de las comunidades. Destaca la importancia de estar al lado de la comunidad en momentos difíciles para paliar los estragos del fenómeno de El Niño y aliviar la desolación que la sed ha dejado a su paso.

Un vocero de la comunidad, mojado y feliz dijo emocionado “Agradecemos a la Policía Bolívar por su compromiso y generosidad al brindar ayuda cuando más se necesita. Que este acto inspire a continuar construyendo puentes de solidaridad en nuestra comunidad y más allá. Hoy hemos aprendido la lección de que incluso las máquinas más imponentes pueden transformarse en fuentes de vida”,

El extraordinario gesto de solidaridad transforma la percepción de la robusta maquina policial, infundiendo felicidad en una comunidad que hoy recibió “chorros de vida” y vio la transformación de una máquina de represión en un símbolo de esperanza.