La Unión Europea (UE) alcanzó un hito significativo al cerrar un acuerdo sobre el pacto de migración y asilo, con el objetivo de gestionar de manera previsible y ordenada los flujos de inmigrantes a su territorio. El Consejo y el Parlamento europeos lograron un avance crucial en la reforma para mejorar el sistema de migración y asilo de la UE, según anunció la presidencia española del Consejo de la UE.
El acuerdo político abarca los cinco expedientes del nuevo pacto de la UE sobre migración y asilo, marcando un momento histórico, según destacó la comisaria de Interior, Ylva Johansson, y el vicepresidente comunitario Margaritis Schinas. Tras dos días de negociaciones, se superaron los últimos obstáculos del complejo paquete legislativo propuesto por la Comisión Europea en 2020.
Juan Fernando López Aguilar, presidente de la Comisión europarlamentaria de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior, resaltó la importancia del Pacto de Migración y Asilo, considerándolo un éxito que representa un paso adelante ante la situación insatisfactoria de la que venían. El principio de solidaridad y justo reparto de responsabilidades entre los Estados Miembros se convierte en legislación europea vinculante, según López Aguilar.
El eurodiputado sueco Tomas Tobé, ponente del reglamento sobre la gestión del asilo y la migración, afirmó que las nuevas reglas permitirán recuperar el control de las fronteras externas y reducir la presión migratoria hacia la UE. El acuerdo, alcanzado entre la presidencia del Consejo de la UE, el Parlamento Europeo y la Comisión Europea, deberá ser formalizado y adoptado en el primer semestre de 2024.
El paquete migratorio busca dotar a los Veintisiete de un mecanismo previsible para responder a necesidades como la protección de fronteras, acogida de refugiados y retorno de quienes no tienen derecho a permanecer en la Unión. La reforma de la política migratoria europea, gestada desde 2016, se materializa con este pacto, que surge en respuesta a la llegada masiva de inmigrantes en ese año.
En septiembre de 2020, la Comisión Europea, dirigida por Ursula von der Leyen, presentó un nuevo pacto sobre migración y asilo, rechazando las cuotas obligatorias de refugiados. La solidaridad «a la carta» permite a los Estados miembros participar voluntariamente en esfuerzos conjuntos, como financiar centros de acogida. El pacto migratorio comprende cinco reglamentos y otras cuatro piezas legislativas provenientes de propuestas de 2016.