CON 2.2. BILLONES INVERTIDOS EN SEGURIDAD ALIMENTARIA SE BENEFICIARIAN  MAS DE  200 MIL USUARIOS

La Alcaldía de Barranquilla destinó este año 2,2 billones de pesos en seguridad alimentaria para beneficiar a 200.000 personas, principalmente de la primera infancia atendida en los Centros de Desarrollo Infantil, además de niños, niñas y adolescentes que se forman en los colegios públicos y que reciben alimentación escolar, así como adultos mayores y habitantes de calle, revela un informe de la administración distrital.

El informe destaca además que durante los cuatro años de la administración de Jaime Pumarejo Heins lograron reducir de manera considerablemente los índices de inseguridad alimentaria, tal como lo confirmaron las cifras del Dane. Eso se explica por ejemplo, que de una destinación de 100 pesos del presupuesto distrital, 72 se invirtieron programas sociales, lo que ubica a Barranquilla en la ciudad con menores índices de pobreza monetaria e inseguridad alimentaria. Barranquilla ha mejorado en los últimos 16 años las condiciones de vida de sus habitantes.

Entre 2021 y 2022 unas 62.753 personas salieron de la pobreza monetaria en la ciudad, destaca el balance oficial. Esta misma encuesta reveló que en el 2020, antes de la pandemia, el 45 % de los ciudadanos manifestó consumir 3 comidas al día, lo que significa que Barranquilla ha mejorado considerablemente las condiciones de vida de sus habitantes durante los últimos años.

Así las cosas, Barranquilla se ubica como la ciudad con el mayor porcentaje de personas que dicen consumir las 3 comidas al día, seguida de Bucaramanga y su área metropolitana (87.1 %) y Tunja (86.2 %). Otras ciudades como Cali tienen un porcentaje de 78.6 %, y Bogotá, 71.4 %.

Pumarejo Heins explica que para alcanzar estos resultados, la ciudad se ha encaminado en un gran proceso de transformación continua, enfocando su gestión en atender las necesidades que enfrentan los grupos poblacionales más vulnerables y en el acompañamiento a las familias para que cada vez sean más productivas. “Vemos que la inversión en seguridad alimentaria está surtiendo efecto, gracias al impuesto que pagan los barranquilleros y no hay mejor manera de retribuirles a la ciudad y a su gente que con inversión social”.

También explicó que el presupuesto del Distrito también le apunta a la reducción de la pobreza monetaria con programas de formación a 60.000 personas beneficiadas con ‘Inglés para el Trabajo’, ‘Universidad al Barrio’, programas de doble titulación en todos los colegios públicos, a lo que se suman los programas de cultura y deporte que llegan a todas las localidades, en todos los barrios de nuestra ciudad. Además de primera infancia, el Distrito brinda la seguridad alimentaria y cobija además a niños, niñas y adolescentes que se forman en los colegios públicos del Distrito
En el balance se resalta que en los últimos 16 años, la dinámica de crecimiento y transformación con la que ha venido evolucionando Barranquilla su modelo de infraestructura, educación, salud, empleo, cultura y deporte, entre otros, ha logrado impactar positivamente en el contexto socioeconómico de muchos hogares vulnerables que, si bien antes vivían en condiciones de desnutrición por comer una sola vez al día, hoy en día tienen la oportunidad de alimentarse correctamente, comiendo tres veces al día.

En ese sentido, para el Distrito de Barranquilla, los índices de pobreza económica y alimentaria que por años han acompañado a los hogares vulnerables de los estratos 1 y 2 es una realidad que poco a poco se ha ido enfrentando, con miras a que el progreso de la ciudad sea más integral, disminuyendo su desigualdad.

Desde el 2008 y hasta la actualidad, la ciudad se ha venido destacando nacionalmente como una metrópolis en la que su nivel de empleo se ha incrementado en más de 1.5 veces, haciendo que la economía de muchas familias empiece a mejorar, para que -de esa manera- puedan acceder a más y mejores productos alimenticios de la canasta familiar.

En esta valiosa apuesta –añade- se concentró la Alcaldía de Barranquilla a lo largo de estos años, teniendo un eco positivo en el gobierno del alcalde Jaime Pumarejo, quien le ha dado continuidad al proyecto.

En Barranquilla hoy hay cientos de familias de los sectores populares de las localidades Suroriente, Suroccidente y Metropolitana que están comiendo bien, puesto que las condiciones económicas en las que viven les están permitiendo acceder diariamente a comer en condiciones de equidad, ingiriendo porciones de comida justas a partir de alimentos que son necesarios para estimular y favorecer su salud y su bienestar físico, mental y emocional.