Termina el año 2022 y son varios los crímenes ocurridos en Barranquilla, el área metropolitana y municipios del Atlántico que aún continúan en la completa impunidad.
Móviles como el robo o personas que recibieron balas ‘perdidas’ son algunos de los hechos que han impactado a la ciudadanía, que espera que durante el 2023 las autoridades logren dar con el paradero de los autores.
El 3 de noviembre fue asesinada la adolescente, de 14 años, Samara Cerpa Avendaño, quien fue impactada por una bala ‘perdida’. La menor subió a un bus de La Carolina para dirigirse a su casa luego de haber salido del colegio. En el camino, cuando iba la buseta por el barrio La Magdalena, se formó una balacera entre dos ciudadanos y unos fleteros que pretendían robarle la suma de 20 millones de pesos que habían retirado de un banco del centro comercial Panorama. En medio del intercambio de disparos, un proyectil ingresó a la buseta y alcanzó en el pecho a la adolescente. La menor fue llevada en la misma buseta al Hospital Universidad del Norte, pero allí se confirmó su muerte. Cabe señalar que las autoridades han ofrecido una recompensa de hasta 50 millones de pesos para dar captura a los fleteros, pero hasta el momento no han registrado capturas.
Fue un 21 de noviembre en un centro asistencial cuando Breiner Núñez García, herido a bala el pasado 16 , en la calle 26 con carrera 18, barrio Villa Concord de Malambo, falleció, cuando sicarios en moto le dispararon a otra persona que murió ese mismo día. Al parecer, el atentado iba dirigido contra este último hombre y una bala rebotó e impactó a Breiner.
Breiner era una persona amable, responsable y querida por muchos. Todos están pidiendo justicia a la Policía Metropolitana de Barranquilla.
Hasta ahora las autoridades no han reportado capturas por este hecho.
En Soledad, El 16 de noviembre fue asesinado a bala el líder social José Antonio Torregrosa González.
El hombre, quien era vicepresidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Altos de Jesús de Soledad, fue asesinado de un balazo en la frente, según sus familiares y residentes de la zona, en medio de un atraco en la calle 28 con carrera 24, barrio Ferrocarril de Soledad.
A José Antonio le propinaron un balazo en la cabeza, a uno de sus acompañantes lo golpearon con la cacha del revólver y el otro que iba con ellos alcanzó a correr y huir del sitio.
Sus allegados lo catalogaron como una persona servicial y con un don para trabajar por la comunidad, de allí su labor como líder en su barrio. Por su crimen aún no se reporta la primera captura.
A Yasser Yuseef Gloria Bernal, de 35 años de edad, fue hallado muerto el 14 de octubre, en una zona enmontada en inmediaciones de Caño Dulce, en jurisdicción del municipio de Tubará. El hombre se encontraba desaparecido desde la noche del jueves 13 de octubre, cuando conducía un Kia Sonet modelo 2022, de color gris plata oscuro, de placas KQV 742. La camioneta fue robada y Yasser Yuseef fue encontrado amarrado de brazos y piernas. La víctima habría sido asesinada mediante asfixia, debido a que no hallaron heridas en su cuerpo.
El 10 de noviembre se conoció de la recompensa de hasta 10 millones de pesos para quien suministrara información que conduzca con la captura de los responsables.
Por otra parte, El patrullero Edward Rafael Roca Barceló fue asesinado en la madrugada del sábado 5 de noviembre cuando estaba sentado en una mesa de un establecimiento de comidas rápidas, en la calle 42 con carrera 8, barrio La Alboraya, en el sur de Barranquilla. Un video de una cámara de seguridad muestra cómo se le acercó un hombre a pie y le disparó en repetidas ocasiones en la cabeza. El patrullero estaba de civil y en su día de descanso.
El uniformado estaba prestando su servicio en el Centro Automático de Despacho de la Policía Metropolitana de Barranquilla. Tenía 29 años de edad y 10 de ellos los había dedicado a la Policía Nacional. Además, registraba 16 felicitaciones en su hoja de vida laboral y era natural de Barranquilla.
Las autoridades ofrecieron una recompensa de 50 millones de pesos para dar con los responsables, pero hasta el momento la Policía no ha dado a conocer si hay capturas.
El domingo 23 de octubre mataron a bala, en medio de un atraco, a José Roberto Julio Pérez cuando se dirigía a pie en busca de un transporte a la Circunvalar para dirigirse a su trabajo en el restaurante de la Clínica Portoazul. Fueron dos hombres en moto los que se le acercaron para robarle su billetera y le dispararon hasta dejarlo muerto en el lugar. El cuerpo de la víctima permaneció N.N. en Medicina Legal hasta que sus familiares se percataron de que no había llegado a dormir a su vivienda, en el barrio El Por Fin, en el suroccidente de Barranquilla.
El hombre tenía por costumbre no llevarse su celular porque en otra ocasión, a las 4:30 a.m., cuando se dirigía también a su trabajo, lo atracaron y le quitaron en ese momento el teléfono móvil.
Por este caso, la Policía tampoco ha reportado la captura de los dos delincuentes que cometieron este infortunado suceso.
La impunidad también ronda el crimen del comerciante Luis Miguel Ibáñez, de 59 años, quien falleció el pasado 14 de octubre en la Clínica Portoazul, luego de que el 10 de octubre fuera baleado cuando ladrones ingresaron en horas de la madrugada a su vivienda, en un conjunto residencial de la urbanización Villa Campestre, en Puerto Colombia.
En el hecho, su hijo, un joven universitario de 24 años, resultó herido en uno de sus hombros.
Los ladrones lograron huir luego de que padre e hijo los repelieron con un arma traumática. Allí se inició un intercambio de disparos donde resultaron heridos el hombre y el joven de 24 años.