Encabezó algunos documentales de salud y había sido conocida como la mujer más obesa del mundo, esto tras haber alcanzando un peso crítico de 470 kilogramos. Para 2005, su nombre estaba sonando por todos lados y sobre todo el 2008 cuando fue acusada de asesinar a su sobrino aplastándolo. Su vida dio un giro de 180 grados, luego de pesar casi 500 kilogramos.
Muchas cosas ya han cambiado en su vida, no tiene el mismo peso y su caso judicial tomó un rumbo inesperado. Rosales ya no está condenada a habitar en un sillón o en una cama (cuando llegó a su estado más crítico). Su situación era tan grave, que su entonces esposo tenía que hacerse cargo de todo, incluso bañarla.
Mayra había desarrollado linfedema, una inflamación en las piernas a raíz de obstrucciones en el sistema linfático. La primera vez que se vio en pantalla fue a través del documental ‘Half Ton Killer’ (Asesina de media tonelada), estrenado en 2012. La mujer contó que, cuando niña, era muy delgada, pero sus problemas alimenticios se originaron por la ruptura de sus padres.
La tragedia familiar del 2008
Jaime, la hermana de Mayra, un día salió y le encargó a su hijo. La versión que se conoció al principio fue que Mayra había aplastado accidentalmente al niño, asfixiándolo. Sin embargo, tras investigaciones y al revelarse la necropsia del menor salió a la luz que el joven había muerto por un golpe en la cabeza.
Este caso provocó conmoción en todo Estados Unidos. Jaime se declaró culpable y fue sentenciada a 15 años de cárcel. Este difícil suceso de su vida la hizo tomar una decisión radical.
El cambio extremo
Lo primero que hizo fue reconocer que tenía un problema con la comida. Así que comenzó con las cirugías, que la ayudarían a perder peso. Para 2015, Mayra llevaba ya 11 procedimientos quirúrgicos, incluyendo una banda gástrica y cirugías de extracción de piel sobrante. Llegando a pesar 90 kilogramos.
Su vida tuvo otro giro de 180 grados, ya que le llegó el amor y en 2016 se volvió a casar.
El sorprendente cambio de quien fue “la mujer más obesa del mundo”
En 2020 se mudó con su esposo a Texas, y según las publicaciones de su Facebook, está trabajando para bajar aún más de peso. “No hay que rendirse”, recomendó.