En el 2018 se registraron 39.
El 2019 ya culmina y las cifras de mujeres asesinadas en departamento del Atlántico preocupan. El año que cierra deja un saldo de 46 mujeres ultimadas en diferentes circunstancias, una cifra a la alza teniendo en cuenta que en el 2018 se registraron 39 casos.
De los casos en el 2019, cerca de 10 han sido considerados como feminicidio. Es decir, que por el hecho de ser mujer fue asesinada. La mayoría de los hechos ocurrieron en Barranquilla y su área metropolitana.
Los casos más sonados de mujeres asesinadas:
El 22 de enero un ataque sicarial cobró la vida de una pequeña niña. Se trataba de Leonadis Riquet Molina, de 4, quien fue alcanzada por una bala ‘perdida’ cuando los asesinos abrieron fuego contra otras personas que se hallaba en la terraza de una vivienda. En los mismos hechos resultaron muerto el papá de la pequeña, Danilo Riquet Suescún, quien falleció semanas después, y Eduvel José Chico Marriaga, de 34 años.
El atentado ocurrió a las 6:05 de la tarde en la carrera 1H con calle Murillo, en el barrio Bellarena de Barranquilla.
De otro lado, el 26 de enero, cinco personas fueron asesinadas a bala al interior de una vivienda, ubicada en la calle 33 G número 1B-04, barrio Universal de Barranquilla. Hombres que se hicieron pasar por uniformados de la Sijin mataron a todos los que estaban dentro del inmueble. Entre los fallecidos figuraba Claudia Bauza Hernández, de 18, quien tenía tres meses de embarazo.
Un semana después, el 2 de febrero, se presentó una masacre en un finca llamada ‘El Gran Chaparral’, entre los barrios Villa del Rosario y Las Terrazas, en el noroccidente de Barranquilla. Cuatro personas fueron asesinadas con arma blanca en el lugar, entre ellas tres mujeres. Se trataban de Betsaida del Carmen Acevedo Espinosa, de 42 años; su hermana Griselda del Carmen, de 42; y la prima de ambas Sandra Milena Ricardo Montes, de 35. Por este hecho ya hay tres personas capturadas.
Por su parte, el 23 de marzo ocurrió un doloroso caso cuando dos ladrones atracaron un bus de Lucero – San Felipe. En medio del hecho de inseguridad, una bala impactó a una niña de 3 años que iba con su mamá y su hermano dentro del vehículo. Se trataba de Salomé Sofía Jiménez Mendoza, quien fue llevada al Hospital Nazareth, donde se confirmó su muerte.
Los hechos ocurrieron en la calle 58 con carrera 20, barrio Pumarejo de Barranquilla. Por este trágico suceso ya fueron capturados los dos presuntos atracadores.
De otro lado, el 2 de abril madre e hija fueron baleadas por sicarios cuando se encontraban en la terraza de su casa. Se trataban de Durley Patricia Romero Diago, de 19 años; y su pequeña hija de un año. La joven falleció el mismo día de los hechos, mientras que la menor dos días después. Los hechos ocurrieron en la calle 108 con carrera 23, barrio Los Olivos I, en el suroccidente de Barranquilla.
Por su parte, el 13 de abril ocurrió otro caso horroroso. Un adolescente, de 17 años, mató a puñal a su propia mamá Arletys María Vargas Bovea, de 46 años, cuando ella dormía en su habitación. El hecho ocurrió en la carrera 9 sur con calle 72, barrio 7 de Abril. El menor homicida fue aprehendido por la Policía.
El 19 de mayo fue hallado en una zona enmontada, cerca de un arroyo de la Urbanización Caribe Verde, en el suroccidente de Barranquilla, el cuerpo de la pequeña María José Ortega Ballesta, de 6 años. Por el hecho, fue aprehendido un adolescente de 17 años, quien culpó a su tío Gimy Chapman de ser el autor intelectual del crimen. Este fue capturado y asegurado en la Modelo, pero tras una investigación más profunda la Fiscalía determinó que el adolescente había entregado un falso testimonio y Gimy quedó en libertad durante el mes de diciembre luego que el ente acusador solicitara al juez el archivo de su investigación. El adolescente, autor material del crimen, sigue internado en un centro para menores.
Por su parte, el 7 de junio, Aracelis del Socorro Amador de García, de 70 años, fue desmembrada por su sobrino Jorge Eliécer Vélez Amador, de 49 años. El hombre le cortó las extremidades inferiores y superiores, y envolvió el dorso en una alfombra.
Vélez Amador salió del apartamento donde cometió el brutal crimen y llevó las extremidades en una bolsa, llegó a una tienda del barrio El Recreo y le pidió el favor a una tendera que le guardara la bolsa en el congelador, pero nunca le dijo a la tendera qué había dentro.
El hombre fue capturado cuando volvió al apartamento de su tía, luego que vecinos se percataran que la mujer no salía y de inmediato llamaron a la Policía, que descubrió la macabra escena.
El hombre aceptó cargos en audiencias preliminares y en julio de este año fue condenado por un juez de conocimiento a la pena de 39 años de prisión.
Los hechos ocurrieron en la calle 94 con carrera 56, edificio Lisboa, en el norte de Barranquilla.
Casi un mes después, el 5 de julio, fue asesinada una mujer del servicio doméstico por un falso repartidor de domicilios de Rappi. Se trataba de Angélica María Ruíz Vega, de 57 años, quien recibió un tiro cuando el repartidor, al parecer con la intención de robar, trató de ingresar a la fuerza al inmueble. El hecho ocurrió en la carrera 75 número 86B-96, barrio El Limoncito, en el norte de Barranquilla. Por este hecho, aún las autoridades no han reportado capturas.
Otro caso que causó conmoción fue el ocurrido el 13 de diciembre cuando una adolescente de 15 años, identificada como Adriana Margarita Martínez Fontalvo, fue apuñalada, golpeada, atada de brazos y piernas y finalmente asfixiada por otra adolescente, de 16, quien fue aprehendida por la Policía. Las autoridades no descartan que más personas hayan participado en el atroz crimen.
El caso ocurrió en el Conjunto Residencial Ciudadela Real, en el barrio Villa Concorde del municipio de Malambo.